Club de lectura

06 Abr 2024
11:00AM -
Eloy Tizón
27 Abr 2024
11:00AM -
Sandor Marai

Revista

Servicio de lectura

Lectura de manuscritos y tutorías para obra en curso 

Servicio de lectura


Informa EFE y FL

En todas sus facetas, una de las señas de identidad de Reich-Ranicki era la claridad y la contundencia de sus juicios, que él solía defender frente a colegas menos claros a la hora de elogiar o rechazar un libro.

A veces también deliraba ante la obra de autores que apreciaba, como el español, Javier Marías, de cuyo éxito en Alemania es, en buena parte, responsable, o el colombiano Gabriel García Márquez.

Con la mayoría de los autores contemporáneos alemanes tuvo una relación que oscilaba entre el amor y el odio.

A Günter Grass lo fustigó en varias ocasiones de forma inmisericorde y en otras lo elogió. Martin Walser se vio tan afectado por sus críticas que terminó escribiendo una novela, La muerte de un crítico, en la que imaginaba su asesinato.

Al margen de su actividad como crítico, Reich-Ranicki escribió una autobiografía, Mi vida, que se convirtió en un best seller y de la que se hizo una versión para televisión. En ese libro relata su infancia, su lucha por sobrevivir durante la época nazi –escondido con su esposa Teófila en la casa de un zapatero, en Varsovia–.

Peter Hamm (Múnich, 1937), él mismo un crítico literario influyente en las letras alemanas, dirigió en 1967 la edición de Kritik / Von Wem / Fur Wen / Wie? (Crítica de la crítica, Barral Editores, 1971), recopilación de intervenciones sobre el estado y las funciones de la crítica literaria en el contexto de la literatura alemana. Hamm publica desde 1965 sus críticas literarias en Frankfurter Allegemeine Zeitung y Die Zeit.

En Crítica de la crítica, Hamm escribe: "Muchos saben lo que el crítico Marcel Reich-Ranicki ha dicho sobre Arno Schmidt, y a buen seguro lo conocerán mejor que las propias obras de Schmidt. Y entre aquellos que todavía leen por su propia cuenta, la mayoría leen con los ojos de Reich-Ranicki o de Blöcker, en vez de utilizar sus propios ojos. La autoridad del crítico ha llegado a ser tan grande, que incluso muchos autores ya tienen en cuenta, cuando escriben, al crítico que más tarde va a informar sobre ellos; el modo del consumo ya influye pues sobre la producción".

Y el propio Martin Walser, en su aportación al libro, escribió, sin duda refiriándose a Reich-Ranicki: "Si descompongo en sus elementos integrantes el papel que ellos erigen en sus críticas, me doy cuenta de lo que realmente quieren ser: un poco médico municipal, un poco Moisés, un poco policía de tráfico, un poco espíritu universal, un poco tía Lessing, un poco tío Linné, un poco robert Koch, un poco Mengele, un poco liebre, un poco serpiente, un poco intelecto autodidacta on the rocks, y un poquitín escritor".

 


 

El discernidor máximo. Por Javier Marías.

 

Un maestro absoluto. Por Cees Nooteboom.

Colaboramos con:

                               Concurso jóvenes talentos                                              Universidad Camilo José Cela